La invasión de jejenes conocidos también como barigüí se convirtió en una verdadera pesadilla para los pueblos de la Cuenca del Salado. En General Belgrano, uno de los distritos más afectados, vecinos aseguran que se forman “nubes de insectos” imposibles de evitar.
Pero el fenómeno no se limita a esta ciudad: la plaga también alcanza a General Viamonte, Bragado, Junín, Alberti, Chivilcoy, Mercedes, Roque Pérez y otras localidades que se ven desbordadas por la presencia de estos diminutos pero molestos insectos.
Ante la preocupación creciente, algunos municipios iniciaron operativos de fumigación en espacios públicos. Sin embargo, la sensación generalizada es que los esfuerzos no alcanzan y que la situación podría empeorar.
Especialistas advierten que esta es apenas la antesala del verano. Las intensas lluvias de las últimas semanas crearon el ambiente ideal para la reproducción del barigüí, por lo que todo indica que el insecto seguirá presente durante los próximos meses. Esto genera malestar entre los vecinos y amenaza con afectar la actividad turística justo antes del inicio de la temporada.